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Las hamburguesas son gourmet, la barra de pinchos es de casi dos metros y las variaciones de mojitos, gin tónics y vermús, espectaculares. Además, ofrecen quince tipos de tapas diferentes, tablas y platos en una reducida pero selecta carta. El restaurante Bocalto Palma es un espacio muy “de la vieja escuela” tal y como puntualiza Débora Protti, la otra mitad del corazón que late aquí. "Es un estilo moderno, pero con mezcla británica, termiinados en madera y dorados... un lugar en el que se está bien".
“Es un estilo moderno, pero con mezcla británica, terminados en madera y dorados… un lugar en el que se está bien”.
Su cocina es internacional y tiene una gran personalidad. Especialmente solicitada es la Hamburguesa Señorito, carne cien por cien de ternera Angus acompañada de cebolla caramelizada foie, queso de cabra y pan de cristal.
Para paladares vegetarianos destaca la hamburguesa hecha con pasta de lentejas, alubias, zanahoria y remolacha, que le da un toque muy similar al de la carne. En este caso se acompaña con mozzarella fresca y salsa de mango, una mezcla dulce y salada que encanta a los comensales. Hay un postre que tiene especial éxito llamado pissang goreg, de origen balinés. Está realizado a base de plátano rebozado entempura dulce, que se sirve con helado de coco artesanal.
Hay un postre que tiene especial éxito llamado pissang goreg, de origen balinés. Esta realizado a base de plátano rebozado en tempura dulce, que se sirve con helado de coco artesanal.
Bocalto Palma tiene innumerables proyectos en marcha, desde establecer los jueves una ruta del vermú, que se ofrecerá junto a una de sus deliciosas tapas, hasta la celebración de eventos culturales en el piso de arriba. “Estamos hablando con la librería Babel para organizar jornadas de lectura, también haremos exposiciones, empezaremos con una de serigrafías” explica Francisco González "queremos que la sala de arriba sea una especie de punto multicultural en el que compartir e intercambiar experiencias".
“Queremos que la sala de arriba sea una especie de punto multicultural en el que compartir e intercambiar experiencias”.
Todo ello acompañado, por supuesto, por uno de los muchos refrigerios que este restaurante ubicado en la Plaza Weyler de Palma ofrece a todo aquel que quiera disfrutar de un rato tranquilo y relajado, cualquier día de la semana.
